Preparándonos para un feo día
Hace unos días cuando al sur, en Chile, tembló por enésima vez, la magnitud del terremoto: 8.2, obligó –como manda el protocolo– a la emisión de una alerta de tsunami para el Perú. Pero una vez emitida la alerta por el Centro de Alertas de Tsunami del Pacífico, el desorden se apoderó de nuestras autoridades.
La norma manda que la Dirección de Hidrografía de la Marina (que no tiene cuenta de Twitter a diferencia del IGP, que ya pasó de 100,000 seguidores) notifique al Indeci, y que esta notifique a 1,600 autoridades y que estas a su vez notifiquen a los comités locales de Defensa Civil pero, con cierta discrecionalidad por parte de las autoridades.
Todo esto no es eficiente. (…)
Publicado el Sábado 12 de abril del 2014 en el diario Peru 21.
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