Durante el mes de Febrero-2024, las temperaturas del aire en la costa han tenido un incremento importante respecto de sus valores normales. Ello va a continuar durante el resto del verano asociado al Fenómeno El Niño y al arribo de la última Onda Kelvin cálida. Por otro lado, las lluvias observadas en la costa confirman el pronóstico de un escenario de un Niño Costero residual con limitada capacidad de causar grandes estragos.
Aún quedan algunas semanas del verano, y eventuales periodos cálidos y lluviosos en la costa pueden registrarse (propios de la temporada); sin cambiar la perspectiva original de una transición relativamente pronta a condiciones normales y posiblemente a La Niña hacia mediados del otoño.
Las anomalías positivas de temperatura superficial del mar se mantienen en el Pacífico Oriental (Niño 1+2) donde se mide El Niño Costero; resultando en un evento de magnitud Moderado a Débil en lo que va de febrero.
Por otro lado, frente a la costa central y sur; núcleos de anomalías cálidas han quedado atrapadas y vienen generando noches muy cálidas que favorecen las olas de calor a lo largo de la costa y especialmente frente a Lima.
En lo que va del mes de Febrero, las temperaturas máximas registradas en los aeropuertos costeros han experimentado un especial incremento en los días 5, 6 y 7 de febrero, habiéndose registrado el día más cálido en la capital el martes 6 de febrero.
La llegada del último tren de Ondas Kelvin cálidas hacia finales de enero, favoreció al incremento de temperaturas, sin embargo; ahora se espera la llegada de Ondas Kelvin Frías (hacia finales de mes), la misma que jugará a favor de disminuir la ola de calor percibida (teniendo en cuenta que se continúa en condiciones de El Niño Costero).
El conjunto de modelos actualizados en febrero 2024 (con datos de enero) y con previsiones a octubre del 2024; muestra que ambas regiones Niño presentan una tendencia hacia condiciones La Niña para los próximos meses.
En la región Niño 1+2 (Niño Costero), se espera persista el descenso de las anomalías cálidas, además desde abril se esperarían condiciones normales y una clara tendencia hacia condiciones más frías que lo normal hacia mediados del otoño.
En la región Niño 3.4 (Niño Global), alcanzó su pico en el mes de diciembre (ATSM de +2.0°C), para luego iniciar su descenso conforme a un comportamiento clásico. La media de los modelos climáticos conduce a un evento de magnitud “Moderado” en el centro del Pacífico para fines del verano (marzo 2024) y tendencia aun rápido enfriamiento que ha llevado a la NOAA a emitir un estado de vigilancia de La Niña.
*Modelos: CFSv2, ECMWRF, JMA, MetFrance, UKMO, DWD, CMCC, NCEP y ECCC.
FEB-MAR-ABR (MODELO NMME)
Las condiciones cálidas “El Niño” en toda la cuenca del Pacífico siguen persistiendo,con énfasis en el centro del Pacífico y ya no en la costa sudamericana, el modelo NMME prevé para el trimestre: FEB-2024, MAR-2024 y ABR-2024, una tendencia de superávit de precipitaciones principalmente en los Andes y una deficiencia en gran parte de la región costera. La variabilidad para el resto del país es poca frente a la media histórica y destaca el hecho de que no se vislumbra un escenario clásico de Niño Costero con superávit de lluvias en la costa norte.
Actualmente los reservorios con mayor porcentaje de almacenamiento respecto a su volumen útil son: San Lorenzo, Tinajones y el conjunto de lagunas del Rímac con 65.9%, 85.1% y 83.4% respectivamente.
Mientras que los reservorios Pillones, Choclococha y Poechos cuentan con los menores porcentajes de almacenamiento con 24.8%, 38.1% y 39.3% respectivamente.
Es preocupante que los reservorios del sur del país aún no alcancen porcentajes de llenado que aseguren el recurso durante el estiaje, teniendo en cuenta que las precipitaciones vienen siendo esporádicas y de poca intensidad. Además, en el norte del país, el consumo de agua supera la cantidad que se está ingresando, y las proyecciones a largo plazo no favorecen grandes precipitaciones.
Las altas temperaturas del aire han generado una extraordinaria demanda de energía al SINAC (los sistemas de refrigeración del aire se han utilizado como nunca antes en nuestra demanda de energía).
Actualmente el récord de consumo de energía en Perú es de 8,263.203 MW a las 11:30 AM del 8 de febrero del 2024, aproximadamente 888.465 Mw más que el mismo día del año anterior (7,374.738 Mw). Producto de este aumento en la demanda, los precios marginales se elevaron considerablemente.
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